Se reducen cargas administrativas y se flexibilizan requisitos para facilitar el acceso a las ayudas
Las nuevas bases reguladoras incorporan mejoras en la gestión y ejecución de los proyectos subvencionados
En los próximos meses está prevista la publicación de la primera convocatoria anticipada bajo este nuevo marco
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha publicado hoy en el Boletín Oficial del Estado las nuevas bases reguladoras de las ayudas destinadas a la realización de proyectos de investigación aplicada en el sector apícola, en el marco de la Intervención Sectorial Apícola del Plan Estratégico de la Política Agrícola Común (PAC). Este nuevo marco normativo actualiza la línea de ayudas con el objetivo de optimizar su funcionamiento y responder a las necesidades detectadas en la aplicación anterior. Entre las principales mejoras destacan la reducción de cargas administrativas, la flexibilización de determinados requisitos para facilitar el acceso a las ayudas, y la introducción de ajustes en la gestión de los proyectos subvencionados. Se clarifica también el perfil de los posibles beneficiarios y la relación que debe existir entre ellos, y se incorporan criterios más precisos sobre la moderación de costes y la aplicación de penalizaciones. Una de las principales novedades es que, a partir de ahora, los beneficiarios podrán solicitar modificaciones en el desarrollo de sus proyectos durante la ejecución de los mismos. Esto permitirá ajustar tanto las actividades como la asignación presupuestaria a las necesidades reales que surjan durante la investigación, lo que mejorará la eficacia y aplicabilidad de los resultados. Desde la anterior reforma normativa ya se permitió que los proyectos pudieran tener una duración plurianual de hasta tres años, frente al modelo anterior de duración anual. Esta ampliación temporal ha permitido mejorar el alcance de las investigaciones y obtener resultados más sólidos y extrapolables al conjunto del sector. La investigación en el ámbito apícola es fundamental para afrontar desafíos clave como las enfermedades sanitarias (especialmente la varroosis), la interacción con otros polinizadores, la caracterización físico-química de las mieles, los efectos del cambio climático y el impacto de depredadores como las avispas del género Vespa (Vespa spp). Con estas nuevas bases, el ministerio refuerza su compromiso con el impulso a la investigación apícola, facilita el acceso a las ayudas y fomenta el avance del conocimiento en aspectos estratégicos para la sostenibilidad y competitividad del sector. Se prevé que, en los próximos meses, el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) publique la primera convocatoria anticipada de esta línea de ayudas bajo el nuevo marco normativo.