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Bioseguridad y Biocustodia en los laboratorios
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Bioseguridad y Biocustodia
Las actividades realizadas en los laboratorios de la División requieren la manipulación de agentes biológicos de distinto nivel de riesgo, para los animales, para las plantas y, en algunos casos, también para las personas. Es primordial, por lo tanto, tomar medidas para evitar la liberación de estos agentes biológicos al medio ambiente y, por otro lado, proteger a los trabajadores.
El establecimiento de medidas de bioseguridad y de adecuados sistemas de biocustodia basados en una identificación de peligros y evaluación del riesgos, son el pilar sobre el que se sustentan cualquier actividad que conlleve la manipulación de agentes biológicos.
Para aquellos agentes biológicos con capacidad de transmisión a las personas, es de obligado cumplimiento el RD 664/97 de 12 de mayo, sobre la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes biológicos durante el trabajo. Por otro lado, en el ámbito de la sanidad animal, se siguen las directrices que la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) establece en el capítulo de Bioseguridad y Bioprotección de su Manual de diagnóstico.
La División de Laboratorios cuenta con las instalaciones adecuadas para una manipulación segura de agentes biológicos de diferentes grupos de riesgo. Instalaciones catalogadas como nivel dos de contención biológica para la manipulación de microorganismos como la Salmonella spp., Campilobacter spp., Trichinella spp., Mycoplasma spp., o Listeria spp. e instalaciones consideradas como de nivel tres de contención biológica para la manipulación de agentes biológicos con un mayor nivel de riesgo, entre los que se incluyen patógenos que pueden afectar a humanos, como los virus de la Influenza aviar de alta patogenicidad, la Fiebre del oeste del Nilo, la Tuberculosis bovina u otros patógenos de alto impacto en sanidad animal, como los virus de la Peste porcina africana, la Peste equina o la Fiebre aftosa. Para este último patógeno, el LCV cuenta con instalaciones que cumplen con los requisitos mínimos de la comisión europea de la FAO para la Fiebre aftosa (EuFMD).
Instalaciones con Nivel de Contención 3
Este tipo de instalaciones reúne toda una serie de medidas que permiten el cumplimiento de sus tres objetivos principales:
1. Evitar el escape de agentes biológicos al medio ambiente. Para ello consta de medidas estructurales, de construcción y equipos de barrera que impiden que cualquier medio que pueda vehicular un agente biológico salga de las instalaciones sin un proceso de esterilización o retención previo. Autoclaves de doble barrera, sistemas de tratamiento de efluentes, equipos de transferencia de materiales con descontaminación química o gaseosa, presión negativa o sistemas de filtración HEPA para el aire son sus principales elementos.
2. Proteger a los trabajadores frente a los riesgos asociados a la manipulación de agentes biológicos. Los equipos de protección colectiva, como las cabinas de seguridad biológica, o los equipos de protección individual, como los equipos motorizados y de suministro de aire o los trajes de protección corporal suponen un instrumento de uso diario en este tipo de instalaciones.
3. Proveerse de sistemas para almacenamiento seguro de las muestras analizadas que impidan el robo, hurto o uso indebido de las mismas con fines ilícitos. Estas instalaciones disponen de control de acceso, sistemas de autorizaciones y almacenamiento controlado de las muestras biológicas.
Todo bajo el sustento de medidas organizativas y protocolización de todas las actividades, que siempre darán sentido a cualquier tipo de instalación.
