El Camino Natural del Tajo se articula en torno a este río, el más largo de la península ibérica, a lo largo de más de mil kilómetros, constituyendo uno de los senderos de gran recorrido que atraviesan nuestro país. Nace en los montes Universales, en la Sierra de Albarracín y recorre un elevado número de paisajes hasta llegar a la frontera portuguesa en Cedillo.
Se trata de uno de los caminos más emblemáticos de nuestro país lo que hace que, su propio uso, la acción de los agentes atmosféricos o el tránsito ocasional de medios mecánicos o animales, provoque el deterioro de los elementos e infraestructuras que le son propios.
Para poder garantizar el uso y disfrute de este camino en las condiciones adecuadas, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha puesto en marcha las obras necesarias para conseguir la continuidad y mejora de las condiciones de tránsito y uso tanto del trazado como de las áreas recreativas existentes. Estos trabajos, que tendrán un plazo de ejecución de 24 meses, servirán igualmente para reparar los deterioros producidos por el paso del tiempo y, en algunos casos, por los actos vandálicos, en parte de la señalización, así como otros elementos como talanqueras, reparando y retirando aquellos elementos que estén en mal estado, para sustituirlos por otros nuevos. Lo mismo se hará con el mobiliario distribuido a lo largo del camino y en las áreas recreativas.
Estas actuaciones, que serán ejecutadas, dirigidas y financiadas en su totalidad en el marco del Programa de Caminos Naturales, se realizarán en las provincias de Teruel, Cuenca, Guadalajara, Madrid, Toledo y Cáceres, atravesadas por el Camino Natural del Tajo.